Se limita el acceso de mujeres en la línea de combate por ocasionar distracciones peligrosas

Las mujeres alistadas en el ejército británico no podrán combatir en primera línea, ya que los mandos militares creen que podrían dificultar el seguimiento de órdenes por parte de los soldados en medio de una batalla.

Mujer Nueva 23.05.02 

Fuente: The Daily Telegraph, Reino Unido

No se sabe qué pasaría

        Las mujeres alistadas en el ejército británico no podrán combatir en primera línea, ya que los mandos militares creen que podrían dificultar el seguimiento de órdenes por parte de los soldados en medio de una batalla.

        Geoff Hoon, Secretario de Defensa, declaró no estar preparado para poner en riesgo la eficacia de la infantería de primera línea y de los equipos de combate directo cuando nadie conoce los efectos de introducir mujeres en estos cuerpos.

        Su decisión fue tomada después de dos años de estudio sobre qué pasaría en caso de levantar la prohibición existente.

En general parecen menos idóneas en algunos puestos

        Los oficiales declaran que es posible que, en el campo de batalla, las mujeres no reaccionen del mismo modo que sus compañeros. Su presencia podría hacer que los hombres actuaran de forma distinta, ya sea defendiendo a las heridas, ya negándose a acatar órdenes de abandonarlas. También podría haber problemas con las actitudes hacia el otro sexo, que reducirían la eficacia de un grupo de combate.

        La decisión fue bienvenida por el Almirante Sir Michael Boyce, jefe del Gabinete de Defensa, quien dijo que aceptar a las mujeres en esos puestos sería un “experimento irresponsable”. Pero los demócratas liberales y la Comisión para la Igualdad de Oportunidades dijeron que las mujeres no deberían ser automáticamente excluidas, y que en el caso de tener la capacidad y destreza suficientes, deberían estar en primera línea.

Peores resultados en ciertas áreas militares

        Las mujeres pueden manejar aviones de combate, servir en barcos de guerra (aunque no submarinos), y realizar el 70% de las actividades de las Fuerzas Armadas, incluyendo ingeniería y artillería, donde algunas han participado en primera línea como observadoras. Pero están excluidas de las unidades que deben estar “cerca del enemigo”, que incluye las fuerzas especiales, la infantería, los mandos de la Marina, el regimiento de la RAF (Fuerzas Aéreas) y otros.

        El estudio, llamado “Las mujeres en las Fuerzas Armadas” señala que las mujeres tienen peores resultados que los hombres en las pruebas físicas clave. Pero el ministro Hoon consideraba que, ya que algunas mujeres obtienen los mismos resultados que los hombres, no había razón para continuar con la prohibición. Si bien las mujeres parecen tener una capacidad de agresión más reducida, el equipo de estudio ha comprobado que podría cambiar si se produce una “licencia social y una provocación suficientes”.

Peligroso para hacer experimentos

        Sin embargo, tampoco hay pruebas de que los hombres puedan reaccionar distintamente en caso de que ellas caigan heridas en combate directo.

        Así pues, el estudio no deja claro si la inclusión de mujeres afectaría la efectividad de los combates de alta intensidad. La infantería y otros equipos trabajan en pequeñas unidades (equipos de fuego o de tanque). Los soldados están sujetos a una intensa disciplina, que les exige obedecer cualquier orden sin preguntas, aún con riesgo para su vida. “El mantenimiento de la cohesión entre los miembros del equipo constituye un componente vital para sostener la efectividad del combate. Hasta el más pequeño error puede llevar a la pérdida de vidas o el fracaso de los objetivos”, explica el informe.

        La capitán Erica Bridge, una de las mujeres que sirven en la Artillería Real, cree que es la decisión correcta. “No tenemos ninguna experiencia de cómo funcionaría, y una batalla no es el lugar adecuado para hacer experimentos sociales”.