The Passion y Cinderella Man, dos buenos ejemplos del correcto tratamiento de la imagen de la mujer en el cine, fomentado en el II Simposio Internacional Educación y Cine
“Un nuevo modelo de mujer
en el cine”
Propuesta de una experta en un encuentro mundial La ex directora del Grupo Interdisciplinario para Asuntos de la Mujer en México destaca en el II Simposio Internacional Educación y Cine, en relación a los valores femeninos, que “su misión protectora de la vida y su intuición” ayudan “a configurar la civilización del amor”.
La necesidad de que las mujeres tengan una presencia más dinámica en el cine, y que éste promueva “una mayor presencia social de la mujer” y de sus verdaderos valores, es la propuesta lanzada por la ex directora del Grupo Interdisciplinario para Asuntos de la Mujer en México, Valeria Guerra Soler. La reflexión de Guerra Soler fue presentada en el II Simposio Internacional Educación y Cine, que se realizó en la Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir”, y sirvió para reivindicar la necesidad de “un nuevo modelo de la mujer en el cine”.
 

        La experta insistió en que cada vez es más necesario evidenciar en el cine las “características propias de la mujer, como su realización en el amor, su fortaleza, el genio femenino, su misión protectora de la vida y su intuición”, que le ayudan a comprender a los demás y “contribuir a la riqueza de las relaciones personales”.

        Como ejemplos de un “correcto y apropiado tratamiento de la mujer”, la experta mencionó a los personajes de María de Nazaret de la película La Pasión, y el de Mae Braddock de Cinderella Man.

“Afirmación del valor de la vida”

        El cine debe ser una herramienta –continuó la experta– que muestre que las mujeres con sus características ayudan “a configurar la civilización del amor” al ser una “afirmación del valor de la vida y del amor” y que “al tener una relación intima con el misterio de la transmisión de la vida, están especialmente dotadas a transmitir y proteger la vida y el amor”.

        El II Simposio Internacional Educación y Cine, al igual que el primero, tiene como objetivo afrontar el mundo del cine y su repercusión en la transmisión de mensajes positivos a la sociedad, como importante instrumento de comunicación que es.

        El cine, un vehículo de valores y contravalores, es un excelente medio para influir en una auténtica educación integral. Una película puede ser, al mismo tiempo, un ejemplo de valores o un elemento destructivo por sus referencias contrarias a lo esencial del hombre, tal como se especifica en la web del simposio.