El Papa llama a los cristianos a defender la vida del niño no nacido
Coincidiendo con la celebración del Día de la Madre en distintos países del mundo, Benedicto XVI llama a “la defensa de la familia, a través de leyes justas y capaces de tutelar también a los débiles”
El árbol de la vida

        El Papa Benedicto XVI ha recordado en su visita pastoral a la Toscana, en Italia, que los cristianos deben dar testimonio del amor de Dios mediante la defensa de la vida desde su primer momento, hasta su fin natural, y mediante leyes que defiendan el derecho a vivir de los más indefensos.

        Durante la homilía de la misa que ofició el Santo Padre este domingo, 13 de mayo, Benedicto XVI exhortó a “testimoniar el amor de Dios en la atención a los últimos se conjuga también con la defensa de la vida, desde su primer momento hasta su fin natural”, y que “la defensa de la familia, a través de leyes justas y capaces de tutelar también a los débiles, constituya siempre un punto importante para mantener un tejido social sólido y ofrecer perspectivas de esperanza para el futuro”.

        “En esto, la Iglesia ofrece su contribución para que el amor de Dios esté siempre acompañado por aquel al prójimo” señaló el Santo Padre.

El día de la Madre: gracias al “don de la maternidad”

        Precisamente, en distintos países del mundo, especialmente en Latinoamérica se celebraba el Día de la Madre el mismo día que el obispo de Roma realizaba estas afirmaciones.

        En su mensaje por el Día de la Madre que el arzobispo de Piura y Tumbes (norte del Perú), monseñor José Antonio Eguren, hizo votos para que Dios bendiga abundantemente a todas las madres que son custodias de la humanidad desde el momento de la concepción.

        En su mensaje el prelado escribió que "el Día de la Madre es ocasión para dar gracias a Dios por el don de la maternidad, fruto de la acogida al don de la vida; don que brota en el seno de la mujer desde el momento de la concepción convirtiéndola en madre que crece y se desarrolla en su regazo con la gestación y que luego del nacimiento busca en ella el apoyo constante para su existencia".

        "Dios en su infinita sabiduría y bondad, le confía a las madres, de manera especial, la continuidad y el bienestar de la humanidad", añadió.

        Seguidamente destacó que "frente a un mundo dominado por la lógica de la eficiencia, del propio interés, del egoísmo, de la búsqueda del tener, del placer y del poder como únicos horizontes, la mujer no puede perder el carisma que brota de su maternidad, el cual consiste en preocuparse y donarse por la persona concreta de su hijo, protegiendo esta vida tan frágil incluso con el sacrificio de su propia existencia".

Los obispos de Estados Unidos bendicen al niño no nacido

        Al mismo tiempo, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB) ha publicado una oración para bendecir a un niño no nacido, la madre embarazada, el padre del niño y su familia.

        "Dios, autor de toda la vida, bendice, te rogamos, a este niño por nacer", comienza la oración. "Dale protección constante y concédele un parto saludable".

        La bendición, titulada ‘Rito de la Bendición para un Niño en el Vientre’, está publicada en la web de la USCCB. También se publicó como anexo al folleto del ‘Libro de las Bendiciones’, en el que se incluirá en futuras ediciones.

        La oración dice que Dios ha traído a la mujer embarazada "el gozo maravilloso de la maternidad".

        "Concédele consuelo en toda ansiedad y hazla determinada a guiar a su hijo a lo largo de los caminos de la salvación", añade.

        La parte de la oración por el padre del menor dice que Dios ha "elegido a este hombre para que conozca la gracia y orgullo de la paternidad." En la oración se le pide a Dios que le conceda valor y que lo haga "un ejemplo de justicia y verdad" para el niño.