Vida de "solteritos" y es mejor hacerlo jóvenes
Aníbal Cuevas
La felicidad de andar por casa
La felicidad de andar por casa
Aníbal Cuevas

 

Una especie de locura

Vida de "solteritos"

        El matrimonio es incompatible con una vida de "solteritos". Es cierto que debe de haber ámbitos de autonomía pero el matrimonio no es simplemente la suma de dos individualidades, sino algo nuevo. Los esposos que llevan vidas paralelas, ya sea en lo profesional, cultural o económico están condenados a caminar cada vez más separados y terminarán por no conocerse ya que habrán avanzado sin mirar al lado.

        Dicen las estadísticas que el número de divorcios aumenta a la vuelta de las vacaciones de verano, cuando los esposos conviven largos ratos y se dan cuenta de lo poco que les une, durante el invierno cada uno iba a lo suyo.

Es mejor hacerlo jóvenes

        Recuerdo la idea chestertoniana de que para casarse hay que estar loco y para tener hijos, muy loco. Efectivamente hay muchas personas que planifican todo mucho, qué voy a estudiar, cuando voy a terminar los estudios, en que voy a trabajar, a dónde voy a llegar en mi carrera profesional ..... y al final, muy al final, se plantean casarse o tener un hijo

        Como suele ser muy al final, cerca de los treinta y cinco o cuarenta años, ocurre que muchas mujeres no consiguen quedarse embarazadas y comienza la locura de la inseminación artificial, la fecundación in vitro..... Si lo consiguen, ni el cuerpo ni el tipo de vida que han llevado se adaptan a tener un niño y empiezan los problemas.

        Vuelvo a citar a Chesterton que afirmaba que los que acaban mal de la cabeza son los racionales, los que lo organizan todo, los que planifican. Los más cuerdos, los locos que deciden hacer las cosas sin tanta planificación, se casan cuando se enamoran de la persona con quien quieren pasar el resto de su vida, tienen hijos cuando son jóvenes y disfrutan del misterio y la locura de formar una familia.