Durante la charla, organizada por la Alumni Navarrenses y la Asociación Cultural Almazara, y enmarcada en el ciclo “La familia en el siglo XXI”, señaló que "la verdadera conversación es diálogo y la esencia del diálogo es la escucha activa. Comunicar con el cónyuge significa dejar de hacer lo que se estaba haciendo y mirarle a los ojos".

        Para superar las dificultades que surgen en la convivencia diaria, este profesor recomendó "hablar sin prisas y con diálogos profundos; hablar después de haber surgido el problema –antes de que el "globo" se hinche y explote– y tener capacidad para reconocer errores, pedir perdón y perdonar, y realizar actos de desagravio". Para el autor del libro La camisa del hombre casado feliz, "los conflictos y crisis deben verse como retos que superar, como oportunidades para que el amor crezca y madure".

Las claves de los matrimonios felices

        Gerardo Castillo, profesor del departamento de Educación de la Universidad de Navarra, indicó que la clave de los matrimonios felices se encuentra fundamentalmente en "haberse casado para siempre, y no de forma provisional". En su opinión, "casarse es mucho más que enamorarse: es darse, entregarse al otro sin reservas ni cautelas. Con este amor comprometido y de entrega se relativizan y vencen las dificultades. Además, se tiene la tranquilidad de no estar siempre a prueba. Es un amor ganador".

        En cambio, quien no se casa para siempre tiene un amor que, a su juicio, está en todo momento supeditado a lo que ocurra, sin ninguna garantía de estabilidad. "Es el amor 'light', superficial, que no acepta responsabilidades y que no aguanta casi nada. Es un amor perdedor".

        Otras de la claves que enumeró Gerardo Castillo en su conferencia son "aceptar al otro como es, sin pretender cambiarle; actualizar el amor de entrega cada día y cada hora; vivir para el otro, para hacerle feliz, y no para sí mismo; reestrenar diariamente el amor, evitando el acostumbramiento y la rutina; redescubrir motivos para la mutua admiración".