Un experto afirma que el permisivismo actual de muchos padres ha creado "una generación de niños maleducados"
El catedrático José Manuel Esteve es catedrático de Teoría de la Educación de la Universidad de Málaga.y formó parte de un tribunal de tesis doctoral en la Universidad de Navarra.
Un falso modelo         "En nuestra sociedad está bastante extendido el modelo educativo de libre desarrollo, por el que los padres permiten a los hijos todo tipo de conductas y piensan que deben educarse en una especie de neutralismo en el que nadie debe influir". Así lo afirmó en la Universidad de Navarra José Manuel Esteve, catedrático de Teoría de la Educación de la Universidad de Málaga, quien visitó el campus de Pamplona para formar parte de un tribunal de tesis doctoral.

        Según este experto, "con este falso modelo educativo los niños se desconciertan mucho más que con uno basado en la autoridad". Mientras este último, a su juicio, conduce a que en la adolescencia el niño rompa con el modelo de los padres y construya el suyo propio –cogiendo lo que le parece bueno y desechando lo malo– "el modelo de libre desarrollo ha producido una generación de niños maleducados por su familia".

        Para José Manuel Esteve, este hecho constituye una de las fuentes de distorsión más importantes de nuestro sistema educativo, "en el que los problemas de los hijos no son más que el reflejo de los de los padres".

Al menos hemos tocado fondo El 100% de los problemas en las aulas

        Por otro lado, se refirió al estrés que sufren hoy los profesores. En su opinión, más que hablar de este trastorno habría que hablar del "desconcierto que padecen los docentes, debido a un cambio social muy rápido y profundo, y ante el que muchos educadores no saben qué papel jugar".

        "Por primer vez –explicó– se ha integrado en el sistema educativo al 100% de los niños, con el 100% de los problemas psicológicos, sociales, etc. Niños difíciles, conflictivos, que hace 30 años no llegaban al sistema educativo o eran rápidamente expulsados". Esto exige un cambio de estrategia, de objetivos, de planteamientos didácticos, que "muchos profesores no han sabido asumir. Por eso, la sociedad tiene una visión falsa del sistema educativo, en la que predomina lo negativo".

        Según explicó este catedrático, "los profesores recorren una escala gradual hasta llegar al estrés o desequilibrio psicológico: desconcierto, sentimientos de inadecuación, insomnio, ansiedad... Es una situación que se acumula, sobre todo cuando los profesores no aceptan comunicarse y hablar de sus problemas. Pero la realidad es que sólo un 1,5% ó 1,6%" de los docentes padece trastornos psicológicos graves".

        José Manuel Esteve, autor de libros como El malestar docente (1987, 1989, 1994, 1997), Los profesores ante el cambio social o La tercera revolución educativa (2003), se mostró optimista ante el futuro: "Los problemas ya han tocado fondo y nuestra escuela como institución ya empieza a reaccionar".