Núm. 233 de ALBA y participante en festejos del Orgullo Gay.
Obama proclama el mes del Orgullo Gay y el Papa propone al Corazón de Jesús
El Islam radical al que respalda Obama condena a muerte al homosexual y lamina la libertad religiosa.
¿Qué es enamorarse?

 

 

Quedar bien con todos es imposible y lo hace incoherente

        EL presidente de los Estados Unidos, Barack Hussein Obama, está demostrando que la profunda reverencia que le hizo al rey Abdalá de Arabia Saudí no fue algo casual. El presidente Obama no pierde ocasión para alabar la cultura islámica y buscar el acercamiento hacia el mundo musulmán. Recientemente nos ha sorprendido declarando que “el islam tiene una orgullosa tradición de tolerancia como evidencia la historia de Andalucía y Córdoba durante la Inquisición”. Eso lo único que pone en evidencia es su gran ignorancia (o la de sus asesores), ya que la época de mayor esplendor del califato de Córdoba se produjo con Abderramán III, en el siglo X, mientras que la Inquisición nace 200 años después.

¿Experto funambulista?

        Pero además, ¿a qué tolerancia se refiere? En muchos de los países de corte islamista no se respetan los derechos humanos fundamentales, se discrimina a la mujer, no hay libertad religiosa, se castiga con la pena de muerte la homosexualidad y destacan por su falta de democracia. Obama se inclina ante esas sociedades totalitarias y al tiempo obsequia a los homosexuales declarando junio como el Mes del Orgullo Gay. En un comunicado, el presidente norteamericano asegura: “Yo, Barack Obama, presidente de Estados Unidos de América, en virtud de la autoridad que me otorga la Constitución y las leyes de los Estados Unidos, proclamo por la presente al mes junio de 2009 como el Mes del Orgullo de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales. Hago un llamamiento a la población de los Estados Unidos para revertir la discriminación y los prejuicios que existen en todos lados”. Obama reconoce también “las grandes y duraderas aportaciones de gays, lesbianas y transexuales a la sociedad americana”. Por último, menciona expresamente “el apoyo a las uniones civiles” y “el reconocimiento del derecho de adopción” por parte de personas del mismo sexo. El hecho, que no tiene precedentes, ha sido recibido con júbilo por la comunidad homosexual. Toda una paradoja.

        Mientras tanto, en este mes dedicado por la Iglesia Católica al Sagrado Corazón, el Papa Benedicto XVI recuerda que Cristo es el corazón del mundo. Además, el Santo Padre explica que el Corazón de Cristo es un “símbolo de la fe cristiana, particularmente amado tanto por el pueblo como por los místicos y los teólogos, pues expresa de una manera sencilla y auténtica la buena noticia del amor, resumiendo en sí el misterio de la Encarnación y de la Redención”.