Entrevista al Dr. Alejandro Navas García.
Del poder e influencia de los medios en la gente y de la gente en los medios
Ma. Teresa Guevara de Urrutia
Oscar Wilde. La verdad sin máscaras
Joseph Pearce

 

 

 

 

Conservadurismo
Robert Nisbet

 

 

 

 

El fuego del cielo
César Vidal

 

 

 

 

La discriminación positiva en el mundo
Thomas Sowell

 

 

 

 

La libertad en la encrucijada
Samuel Gregg

 

 

 

 

El manifiesto de las clases medias
Enrique de Diego

 

 

 

Edmund Burke
de
Russell Kirk

 

 

 

 

 

Aquel por el que llega el escándalo
René Girard

 

 

 

 

La nueva revolución americana
José María Marco

¿Cuál es el papel de los medios de comunicación en la conformación de usos y costumbres en una sociedad?

         Si se pregunta a los medios ellos suelen decir que son el espejo de la sociedad, son como el notario que certifica lo que sucede, ellos piensan que son objetivos y se limitan a esto. Hoy sabemos que esto no es verdad, ellos pueden intentar ser veraces y levantar acta de lo que sucede pero también modifican lo que sucede.

         Los medios pueden ir delante de la sociedad y ser más progresistas o ir por detrás, a veces se quedan en valores que ya nadie defiende.

        Los medios son en una parte espejo, pero también son actores sociales que intervienen para configurar usos, costumbres, valores, pautas, ideas, esto claro es un llamado a su responsabilidad, deben saber que lo que hacen influye a la gente, en sus mentes, en sus comportamientos, en sus valores.

Ante temas como la eutanasia, el aborto y la homosexualidad, ¿los medios de comunicación deben buscar tener un papel neutro o meramente informativo?

         Hoy ocurre en Occidente, y parece que en México en buena parte, que se ha roto el consenso básico en torno a los valores fundamentales.

        Un grupo humano, ya sea pequeño o grande, no puede mantenerse, durar en el tiempo y sobrevivir si no hay un acuerdo de mínimos en cuanto a las soluciones, valores que deben formar, las leyes, las costumbres o las instituciones. Ese consenso en gran parte ha sido estropeado por la moderna ilustración. La forma moderna para suplir ese consenso es el procedimiento, lo que sea justo, bueno o verdadero no es algo dado en sí mismo, para siempre y para todos, fundado en la naturaleza, la ley natural, en Dios o en la tradición, sino que es algo que el procedimiento establece.

        ¿Cuál es el procedimiento en una sociedad democrática? lo que los parlamentos legislan y los jueces aplican en sus sentencias, eso es lo bueno y eso puede cambiar al hilo de las mayorías y la opinión publica; así ocurre de hecho en Occidente, cosas que antes estaban bien ahora están mal y al contrario. Los medios no pueden permanecer neutrales ante este panorama porque la vida no permite la neutralidad, ellos deben de tomar una postura que se muestra de entrada en su línea editorial.

        Todo medio por supuesto es una empresa que debe primero aspirar a sobrevivir y para esto hay que vender ejemplares, tener espectadores o tener publicidad, pero a la vez un medio no puede ser neutro. No hay neutralidad. El medio puede si quiere evitar temas, no comprometerse, no pronunciarse, pero también eso ya es en gran parte una toma de postura, por tanto un medio debe anunciar a sus lectores o audiencia en dónde está, cuál es su posición, qué defiende, a qué aspira y luego ya se verá cómo en el día a día sus redactores, reporteros o editores son o no fieles, son o no coherentes con ese ideario o línea editorial. Ante hechos tremebundos, escandalosos, terribles, el medio se define en el qué hacer. Por supuesto lo que sea noticia hay que contarlo y luego ya vendrá la labor del comunicador de valorar, comentar y hacer columnas editoriales en donde el medio debe procurar situar ese hecho tremendo, tal vez brutal, en un contexto que permita que la gente tenga un criterio para enjuiciarlo.

Haciendo referencia a la nueva realidad en España, en donde con el gobierno de Rodríguez Zapatero se ha legislado a favor de la eutanasia, se permiten matrimonios entre personas del miso sexo y se ha legalizado el aborto, ¿lo anterior ha tenido ya algún efecto social, ya forma parte de una nueva cultura de la vida?

         De momento la repercusión es más bien simbólica y doctrinal, más que social, porque con este tipo de leyes como por ejemplo la del divorcio express, o los matrimonios homosexuales, son medidas de una gran repercusión simbólica pero de muy poca eficacia porque muy poca gente está en ese caso.

        Como siempre para justificar ese tipo de medidas el gobierno invoca una gran demanda social, dijeron que había mucha gente en una situación irregular y que era necesario ponerla en orden.

        En España –dijo la vicepresidenta– que había un 10 % de la población que era homosexual, o sea cuatro millones y pico, y que calculaban que en un año o cuando mucho en dos habría una avalancha de matrimonios homosexuales, unos cien mil. Pues ha pasado casi un año y únicamente han habido dos mil, no había demanda social, el gobierno aquí miente para obtener una medida que la gente no pide y no solicita, pero que para ellos tiene un gran valor ideológico y simbólico. Ahora mismo en todo Occidente existe un debate que marca la vida académica y también política, es el tema del género, las políticas de genero, la identidad de género, etc.

        En el fondo ¿de qué se trata? Qué buscan los homosexuales, no buscan casarse porque además se sabe que el homosexual es muy voluble en su vida afectiva, no buscan un matrimonio estable, lo que se busca en el fondo es eliminar la idea de normalidad, es decir, el sexo ya no seria algo dado por la naturaleza sino construido culturalmente, por ello es muy conviene que haya opciones y orientaciones igualmente válidas o igualmente disponibles: la tradicional heterosexualidad, homosexualidad, bisexualidad o transexualidad.

        En España el gran tema de debate es la transexualidad, esto a ¿cuántas personas les afecta? Al 0.0000001 pero importa para completar la gama de opciones y decir señores todo es igualmente válido, bueno, admisible. Ya algunos gobiernos socialistas en España por ejemplo financian –con cargo a la sanidad pública– la operación de cambio de sexo, de acuerdo a la ley aprobada recientemente en la que uno puede cambiar de sexo simplemente por un acto de la voluntad.

        Uno va al registro y dice quiero ser mujer y firma “Alejandra” y ante la ley eso ya tiene valor. Lo natural por el hecho de serlo exige respeto, no todo es construido. La idea es que no haya algo natural, todo queda a nuestra merced y la realidad es algo manipulable, maleable, como material plástico, como plastilina, con la que podemos jugar a voluntad, eso es lo que hay en el fondo de este asunto de la homosexualidad, la transexualidad y toda la ideología de género.

¿Qué consecuencias tiene en una sociedad la aprobación de leyes como la eutanasia?

         En una parte aquí se da un proceso que se ha repetido muchas veces, ante una nueva realidad, en su caso el divorcio, el aborto, la eutanasia y ahora la clonación que ya viene de entrada nos da horror: “cómo es posible esto es algo espantoso, inhumano”, pero después viene la curiosidad: “y si lo probamos” y después se dice: “vamos a hacerlo pero con cautela, con limitaciones, con restricciones, con controles, sobre seguro”. Se acepta para unos casos excepcionales teóricamente, la praxis se va después ampliando, el asunto ya no se ve tan mal, se despenaliza, es decir, teóricamente sigue siendo un delito, por ejemplo el aborto en España, pero no se castiga, es parte de la técnica jurídica, algo que seguimos llamando malo pero que no se sanciona.

        Al final la ley lo reconoce como bueno y se difunde, porque la ley, el derecho está hecho una parte para resolver conflictos. En la convivencia hay roces, hay confrontación. El derecho da herramientas para que el trafico sea fluido y no choquemos continuamente, pero además de arreglar conflictos el derecho implica siempre una función educativa, lo que la ley establece como bueno, lo que la ley permite, simplemente con el tiempo se ve como bueno.

        El que estas leyes se promulguen puede afectar de hecho a muy poca gente, son leyes para casos muy, muy excepcionales, pero más allá de esa afectación práctica –que es muy minoritaria– sin duda está luego el efecto educativo, las nuevas generaciones serán educadas en la idea de que eso es algo bueno, aceptable y eso es terrible en sus consecuencias.

¿Qué papel deberían jugar los receptores? ¿Qué responsabilidad tienen en la exigencia de contenidos de calidad o contenidos positivos en los medios de comunicación?

         Aquí hay una pregunta clásica del huevo y la gallina, ¿qué importa más la oferta o la demanda? Lo que dicen hoy los medios es que ellos le dan a la gente lo que pide. Un caso típico es el de la televisión, que es donde se plantea más el debate, hay más contenidos a los que se les llama televisión basura y existe la presencia universal de sexo y de violencia.

        En el pasado, cuando la televisión apareció, mandaba sin duda la oferta, los canales eran pocos y ellos hacían la programación, nosotros nos sentábamos en la sala de la t.v. y decíamos “a ver qué nos echan”, de modo pasivo veíamos lo que los otros hacían.

        Actualmente el mercado ha cambiado hay una oferta de canales muy numerosa porque la tecnología lo permite, el cable, el satélite, hay cientos de canales, sin embargo la publicidad que les da de comer ha crecido mucho menos, por eso hay una competencia brutal por la tarta de la publicidad.

        Hoy los canales tienen que adaptarse a las preferencias y gustos del público. Para lograrlo hacen diferentes investigaciones con técnicas, sondeos, estudios de mercado, los audímetros. Sabemos en vivo y en tiempo real lo que el público hace, por ejemplo en los noticieros en cuanto hay política dura el publico se marcha a otro canal, la gente no quiere política dura, la gente quiere glamour, corazón, sociedad, deporte, fútbol, etc. Los canales ahora mismo van detrás de la audiencia, para identificar sus preferencias, sus gustos.

        Hoy la audiencia tiene un peso creciente, esto no anula la tarea de los canales y tampoco los hace ser por completo irresponsables, pero sin duda hoy pesa mucho más la audiencia así que cuando los medios dicen que dan lo que la gente pide, en parte es verdad, otra cosa es que si la gente pide basura se le dé alegremente y sin preocuparse. Pero es verdad que la gente pide basura de una manera mayoritaria.

En un sistema televisivo como el mexicano, en donde hay un duopolio consideramos que los medios tienen más responsabilidad.

         Claro, pero también aquí el mercado está en gran ebullición porque los canales grandes ven que la audiencia se va a segmentar en el futuro, esto ya sucede en Estados Unidos y en Europa. Ya se acabó el que unos pocos grandes, los “Slim y los Azcárraga” se repartan la tarta entre ellos dos solos.

        En el futuro habrá canales temáticos, habrá cable, vamos sobre demanda, a la interactividad, cada vez más los propios espectadores van a hacerse su programación.

        He leído en Internet que la BBC entró en www.youtube.com porque ahora el negocio no va a estar en los contenidos que ofrecen los medios sino en tener plataformas para que los propios televidentes y usuarios hagan sus videos, su música, sus imágenes, esa es la tendencia, y por eso hay en los canales clásicos un gran nerviosismo y se habla de que los Slim y los Azcárraga se van a aliar y que tienen que entrar a Internet. Saben que hay que hacer algo, porque de repente los espectadores van a ser los reyes, los jefes, los que manden, por supuesto que aun falta tiempo. Y es que ahora para hacer televisión basta una cámara de video sencilla, uno sale a la calle, filma y lo pone en youtube.