Cardenal Camillo Ruini
Nuevo libro del Papa explica rechazo de raíces cristianas en Unión Europea
Al presentar el libro “La Europa de Benedicto en la crisis de las culturas”, el Cardenal Camillo Ruini, Vicario de Roma, explicó que en él, Benedicto XVI analiza las dos alternativas que enfrentan los europeos: “vivir como si Dios no existiera, o vivir como si Dios existe y por tanto que influye en la vida, no como un apéndice de ésta”.
ROMA, 22 Jun. 05 (ACI).
 






Saliendo al paso de algunos malentendidos

        El Purpurado explicó que la obra es un trabajo del Cardenal Joseph Ratzinger y por tanto “es el último libro del Cardenal” pero al mismo tiempo constituye el primer libro del Papa al tratarse de “la Europa de Benedicto, nombre que ha querido elegir para él mismo”.

        El volumen, editado por la Editorial Cantagalli y la Librería Editorial Vaticana, tiene una introducción del presidente del Senado Italiano, Marcello Pera, y consta de tres partes: La crisis de las culturas; El derecho a la vida; y Europa, Qué significa creer.

        Durante la presentación del texto en la sede del periódico “Il Tempo” en Roma, el Cardenal Ruini expuso su rasgos fundamentales y explicó que “el Cristianismo ha dejado en Europa su huella cultural e intelectual más eficaz desde el punto de vista histórico”.

        Sin embargo, señaló que este vínculo “hoy es puesto en tela de juicio y corre el riesgo de quedar desgajado por la lógica interna de la racionalidad que parece dominar en Europa: una racionalidad científica y funcional”, donde “Dios no existe o al menos no puede ser comprobado y, por ello, toda referencia a Dios debe ser excluida de la vida pública”.

        Ahora se habla del Cristianismo como un cierto partido de Europa y “no puede ser ni siquiera clasificado como una religión europea”, manifestó.

        “Al mismo tiempo, desfallece la conciencia moral como categoría válida en sí misma: dado que de todos modos la moral es indispensable para vivir, ésta se fundamenta dejando de tomar como referencia lo que en sí mismo es bueno o malo, para tener sólo en cuenta el cálculo de las consecuencias de nuestros comportamientos, útiles o dañinas”, indicó el Purpurado.

        Según el Vicario de Roma, la contraposición actual tiene lugar “entre esta racionalidad meramente científica y funcional y las grandes culturas históricas”. “Una racionalidad así pretende ser universal, es decir, válida para todos y autosuficiente, y como tal excluye que el cristianismo pueda ser a su vez un elemento determinante en la construcción de la Europa de hoy”, agregó.

De interés para todo político

Dios no soporta abstenciones

        Durante la presentación, Marcello Pera –que se proclamó un “laico no creyente”– aseguró identificarse “totalmente con las tesis que expone el Papa Benedicto XVI”.

        Para el político, “se trata de un libro de actualidad por la crisis europea que se ha certificado estos días con los referéndum” y en especial por abordar el tema de la vida con “principios que se ven reforzados y rebatidos fuertemente en nuestros países”.

        Según Pera, el Papa denuncia el empeño por excluir a Dios de la conciencia pública y la ausencia de una referencia al cristianismo en la Constitución europea “porque eliminando el cristianismo de la sociedad se impone la religión del estado laicista, es decir, una religión nueva que no permite a ninguna otra entrar en la esfera pública”.

        “Dios no soporta abstenciones. Es decir, que los laicos debemos actuar como si Dios existiese para poder ponernos en un punto de partida con todos los fundamentos necesarios de nuestra sociedad”, precisó Pera. “Si no aceptase este reto, esta propuesta, y no reconozco mi cultura y mi base, es como si no aceptase a mis propios padres”, agregó.

        Para Pera, “la laicidad no es un obstáculo, pero sí lo es el laicismo, el agnosticismo impuesto por ley”. “El Estado que proclama la ciencia empírica como única verdad, se transforma en maestro de ética, de moral y el final de una nueva religión que impone”, añadió.